La cuestión catalana: ni España es independiente
12 de diciembre de 2013
He estado fuera de España
sin Internet tres días. He llegado a Bilbao, procedente de Londres poco después
de las 21,00. He atendido a una periodista de DV que me preguntaba sobre mi valoración
del año de gobierno vasco, en el propio aeropuerto de Loiu mientras esperaba a
coger el bus a Donosti a las 21.45. Tras revisar mi correo, ya en casa, leo las
noticias y me entero de las preguntas que por iniciativa de cuatro formaciones
catalanas van a formular al pueblo catalán- si les dejan claro está- el 9 de
noviembre de 2014 y unos pocas reacciones. Perfectamente previsibles. Quiero
escribir en caliente, y sin leer nada más, lo que me sale a bote pronto.
Ni siquiera España es
independiente. Ni soberana. España comparte soberanía con la Unión Europea que,
en determinadas cosas- muchas y no
menores- impone su ley. Luego una pregunta sobre la independencia de Catalunya
no tiene sentido más que, refiriéndose a la pretendida independencia de España,
entendida como país soberano, con capacidad de decidir por sí sola lo que
quiere hacer en sus leyes. Lo que es una falsedad. No es cierto, como pretende el Tribunal
Constitucional español que la soberanía reside exclusivamente en el pueblo
español representado en el Parlamento en Madrid. No sé si esto es jurídicamente
correcto pero, desde luego no lo es social, política y económicamente. Que es
lo que importa a un sociólogo.
El “arreglo” al tema
catalán, como al vasco y al español, es reconocer que los "estados naciones" soberanos
han pasado a la historia, “de lege y de facto”, y que hay que aplicar el viejo
principio de subsidiariedad, las soberanías compartidas, que la democracia se
demuestra en el respeto y la conciliación de mayorías y minorías. La vieja
cuestión de donde está el sujeto político con capacidad de decidir, salvo
querer vivir en una isla, es ya una cuestión pasada. Pero mientras se quiera
hacer la Europa
de los estados, sin dar una salida satisfactoria a las naciones sin estado - lo
que no quiere decir necesariamente crear un nuevo estado- Catalunya, Euskadi,
Escocia, Flandres, Pais de Gales y alguno más que irá saliendo (piensen en
Bretaña o Padania) se verán abocados a reclamar una inexistente independencia.
El denominado “frente soberanista”, se residencia tanto en Madrid como en
Catalunya. Si, no más.
Estimable Javier,
ResponderEliminarNo sé si llegará a leer mi comentario. En primer lugar le escribo con respeto, y sin ánimo de molestar. Deseo felicitarle por la riqueza, y honestidad de información que caracteriza su blog, y por supuesto sus libros, que leo desde hace poquito tiempo con estima.
Una pregunta quiero hacerle, para satisfacer mi interés personal: De tiempo, la cultura Católica ¿ ha servido a España para bien ? creo que hay temas que la Iglesia Oficial enmascara todo lo que puede con heroísmo. Esta preguntilla parece que no pero lleva implícita muchas interrogantes. Su respuesta me ayudaría, si no le resulta demasiado pesado.
Con mi agradecimiento anticipado...y le deseo unas felices fiestas, y próspero año 2014.
Un abrazo.
Perdona el retraso en contestar pero he estado ausente y, aunque recibí un aviso en mi email, se me había pasado hasta que acabo de subir otro texto a mi blog. Sería muy largo contestar a tu pregunta. Parte de mi último libro hablo de esos temas. "Los cristianos, ¿en la sacristía o tras la pancarta"?, particularmente en los capítulos 2 y 3.De todas forma no entiendo bien lo que quieres decir cuando escribes que "creo que la Iglesia Oficial enmascara todo lo que puede con heroísmo". ¿Qué enmascara? y ¿a qué heroísmo te refiere?.
ResponderEliminarGracias por leerme. Cordialmente Javier Elzo