No siempre el pueblo tiene razón
(26 de febrero de 2013)
Me apresuro a decir, de entrada, que no hay mejor sistema
político que aquel que consagra el principio de “una persona, un voto”, esto
es, el sistema democrático. La soberanía reside en el pueblo, lo que no empece,
de ahí el título de esta columna, que no siempre el pueblo acierte sino que,
también se equivoca. El ultimo ejemplo, a mi juicio obviamente, nos lo ofrecen
los recientes resultados de Italia. Que Silvio Berlusconi y el cómico Beppe
Grillo, hayan obtenido más del 50 % de votos es una prueba fehaciente de lo que
sostengo. Por delante del centro izquierda de Bersani (mezcla de excomunistas y
católicos progresistas) y Monti (candidato “a su pesar”) habiendo dejado sin
escaño el ex - juez Antonio di Pietro, paladín anticorrupción, a quien tanto
temía Berlusconi. Pues ahí lo ven:
Berlusconi ha estado a punto de ganar de nuevo unas elecciones y la
gobernabilidad de Italia en manos de un cómico.
Los analistas dan mil y una explicaciones a este fenómeno
que seguro Uds. han leído: hartazgo de los políticos (de ahí el triunfo de
Grillo), hartazgo de la austeridad (debacle de Monti), irrelevancia de los
partidos éticos (di Prieto, sin escaño), desconfianza hacia la izquierda (el
techo de Bersani), el populismo de Berlusconi y sus promesas en tiempos de
crisis etc., etc. Pero el hecho es que los líderes y los partidos más serios,
Bersani, Monti y di Pietro han sido
derrotados en detrimento de los histriónicos Berlusconi y Beppe Grillo. Por
decisión popular en un país democrático, donde el voto es secreto y donde la
información seria abunda. Para quien quiera informarse, claro está. Algo falla.
No piensen que este fenómeno responde a no sé qué modo de
ser de los italianos. En el mundo democrático occidental tenemos otras muestras
de este fenómeno. Hitler subió al poder tras ganar unas elecciones el año 1933.
Y llevaba más de una década en la política, sin engañar en sus objetivos, luego
los alemanes ya le conocían cuando le votaron. Como conocían lo americanos a
Bush hijo cuando le reeligieron presidente con más votos que en la primera
elección. Los andaluces llevan treinta años dando el poder al PSOE que no ha
logrado sacarlos de un paro endémico. Los valencianos dan, una y otra vez, la
mayoría absoluta al PP pese a los casos de corrupción conocidos hace tiempo. Un
alto porcentaje de franceses sigo dando su voto al Frente Nacional de la hija
de Le Pen y, entre nosotros, los vascos, un porcentaje significativo da el voto
a HB, ahora Sortu, cuando su modelo de estado tienen que ir a buscarlo a la America Latina de
Cuba, Venezuela, Ecuador etc., etc. Afortunadamente no todos los ejemplos que
he dado son parangonables pero en todos se da la misma circunstancia de que, de
nuevo a juicio de quien escribe, obviamente, el pueblo se ha equivocado en sus
opciones electorales.
Para cada caso los analistas buscan una u otra explicación,
más o menos válida. Pero el hecho, en si mi mismo considerado creo que merece
una pensada. Más de una pensada. Baste hoy para cerrar, que no concluir, que, a
la postre, y en cada momento histórico, cada pueblo tiene los lideres que él
mismo ha generado. Y, llegado hasta aquí, me parece, como poco, una enorme
pereza intelectual limitarse a echar las culpas de lo que pasa solamente a los políticos.
¡Hola! Javier. He entrado por casualidad en este blog. Te sigo en tu columna de DV y en tus distintas apariciones en los medios, siempre documentadas y estimulantes. Suscribo al 100% lo que dices. También ayer, en un blog mucho más modesto que el tuyo, mostraba mi perplejidad por los resultados electorales en Italia, encontrando una cierta relación con el anuncia ese de Euskaltel ('Yo también'), que tanto éxito cosecha entre los profesionales de la publicidad.
ResponderEliminarDices que la información seria abunda. Sin duda. La pregunta es: ¿a quién le interesa la información seria?
Eskerrik asko!
Gracias por tus amables palabras. Trataré de buscar tu blog. Los que vamos por libre, estamos difuminados en la red.
EliminarSigo leyendo cosas de Italia en "Le Monde· y en "La Vanguardia" del dñia de hoy. Quizás escriba sobre ese tema en DV el sábado próximo. Me preocupa el populismo que solamente da respuestas simples a problemas complejos. Y si encuentran algo asi como un "lider", es la antesala del fascismo. Por eso sería muy peligroso repetir las elecciones en Italia. ¡Agur!